APCS Por el equipo de DataSyn. Grietas en el edificio: postales de la frontera tecnológica popular

El equipo de DataSyn narra las historias de activistas, trabajadores e incluso la resistencia y resiliencia de los estados-nación contra las grandes tecnologías.

A medida que la mayor parte del mundo concluye un año de precariedad, privaciones y creciente desigualdad, las grandes tecnologías están preparadas para alcanzar tasas de crecimiento de dos dígitos, y las cinco principales corporaciones mundiales buscan generar $ 1.398 billones en ingresos combinados en 2021 . Sin embargo, esto es solo una parte del panorama. 2021 también fue un año de subversión, con activistas, trabajadores e incluso estados-nación, tirando el guante. El equipo de DataSyn narra algunos de estos momentos críticos de impugnación.

¡Los conductores de Uber van a lo grande y ganan a lo grande!

El año marcó uno de los puntos culminantes en el campo de los litigios para la lucha de los trabajadores contra las grandes tecnologías, cuando la corte suprema del Reino Unido otorgó la victoria a los ex conductores de Uber Yaseen Aslam y James Farrar. El tribunal confirmó el veredicto de que los conductores de Uber no deben clasificarse como contratistas independientes, sino como trabajadores con derecho a protecciones laborales básicas. Este es un momento decisivo hacia el fortalecimiento de la posición de los trabajadores en la economía del concierto. Uber, por supuesto, continúa tratando de encontrar formas de socavar y desafiar el fallo . Pero la fuerza galvanizadora del veredicto ha sido innegable, con miles de demandantes que se presentaron para exigir pagos atrasados, Aslam y Farrar empujando las fronteras.de la batalla legal por cuestiones de datos de los trabajadores, y un tribunal holandés también falló a favor de los trabajadores en un caso separado en la última parte del año.

China asume el exceso de tecnología

Los últimos años han sido testigos de un gran debate en torno al llamado ‘techlash’ , con EE. UU. Y la UE contemplando enfoques regulatorios para frenar a las Big Tech. En diciembre de 2021, la UE anunció un importante proyecto de ley destinado a regular la relación entre los trabajadores de conciertos y las plataformas que los emplean. Sin embargo, lo que destacó en 2021 fue la intervención decisiva del estado chino con una serie de medidas. Esta ráfaga de movimientos del país para disciplinar a sus gigantes tecnológicos autóctonos, que abarca leyes antimonopolio, regulación financiera, protección de datos del consumidor y gobernanza algorítmica, ha tenido un alcance amplio y un propósito radical. El enfoque chino parece ir mucho más lejos estructuralmente que su homólogo occidental en la lucha contra el comercio electrónico ,delimitar la mercantilización de sectores sociales clave, delinear líneas rojas claras para la recomendación algorítmica y las sondas antimonopolio . Si bien aún están por verse las consecuencias de estas medidas, ciertamente plantean nuevas preguntas y abren nuevos caminos en la concepción de la gobernanza económica para la era digital.

China Ensayo fotográfico de DataSyn

Chispas de resistencia en el mercado de plataformas de la India
Este año, los trabajadores de plataformas en la India construyeron de manera constante su organización de base. Una gran huelga de trabajadoras de conciertos contra la plataforma de servicio a domicilio dominante de India, Urban Company, fue testigo de la unión de las trabajadoras de la belleza para protestar por los bajos salarios y las condiciones laborales. Luchar contra las opresivas normas de género y atomizar las estructuras de las plataformas no ha sido fácil para las trabajadoras de conciertos. Como resultado, la empresa se vio obligada a promulgar una serie de medidas para resolver las quejas de los trabajadores; una victoria que sirve como un llamado de atención para ampliar la acción colectiva de las trabajadoras de plataformas del país.

En otra gran historia de la India, Reuters causó sensación con su exposición sobre las extensas prácticas anticompetitivas de Amazon en la India. Los documentos internos filtrados revelaron cómo la compañía siguió sistemáticamente una estrategia de copiar los productos de la competencia, creando imitaciones y resultados de búsqueda de juegos para privilegiar marcas internas como Solimo. De alguna manera, esto es una corroboración de una sospecha que muchos ya tenían con respecto al enfoque de Amazon. Estos momentos de exposición pública pueden servir como puntos de inflexión cruciales para inyectar más matices en las discusiones sobre la política de competencia para la economía de plataformas. Por ejemplo, para debatir la necesidad de separaciones estructurales entre segmentos clave de la cadena de valor de la economía digital.

Ensayo fotográfico de UC DataSyn

Sudáfrica presenta su política de datos y nube

A medida que la centralidad de los datos y las tecnologías digitales para las trayectorias futuras de desarrollo económico se vuelve cada vez más evidente, más y más naciones en desarrollo están comenzando a afirmarse dentro del dominio y tomando medidas regulatorias oportunas para asegurar y desarrollar sus propias capacidades e infraestructura digitales autóctonas. Este año, Sudáfrica se movió con fuerza en esta dirección, con su Comisión de Competencia lanzando una investigación sobre el comportamiento de las plataformas de intermediación en línea, además de presentar su Borrador de la política nacional de datos y nube.. Este último, además de intentar crear un entorno para fomentar los negocios digitales en la economía local y proponer regulaciones sobre datos personales, también avanza hacia el reconocimiento de los intereses económicos cruciales de los flujos de datos al estipular medidas hacia la localización de datos y la soberanía digital. Las acciones nacionales de política digital y de datos de Sudáfrica también son consistentes con la postura firme que adoptó contra las controvertidas negociaciones plurilaterales de la Organización Mundial del Comercio sobre comercio electrónico.

Los trabajadores de Amazon exigen respeto y justicia

Si bien 2021 vio a Amazon cosechar enormes ganancias, también fue un año de crecientes problemas para la empresa, ya que la reacción contra sus prácticas de explotación y despiadadas comenzó a crecer en una variedad de formas. A principios de año, los trabajadores se afanan bajo las condiciones inhumanas de los almacenes de Amazon, se enfrentaron a un importante revés con la f ailure de un voto hito hacia la sindicalización en Bessemer, Alabama. Sin embargo, investigaciones recientes de la Junta Nacional de Relaciones Laborales de EE. UU. (NLRB) han encontrado que Amazon interfirió ilegalmentecon los procedimientos electorales de formas que probablemente influyan en los resultados. Como resultado, la NLRB ha pedido que se elimine el resultado anterior y que se celebren nuevas elecciones. Paralelamente, Amazon también fue objeto de críticas en Europa, lo que provocó multas récord de 887 millones de dólares por violar las leyes de protección de datos de la UE y otros 1.300 millones de dólares por abusar de su posición dominante en el mercado italiano.

Para colmo, el 26 de noviembre (Viernes Negro) vio la segunda iteración de la campaña global Make Amazon Pay , liderada por UNI Global Union y Progressive International que reunió a más de 70 sindicatos, federaciones de trabajadores, grupos de la sociedad civil y otras organizaciones aliadas. . Esto abarcó una serie de acciones de protesta en lugares de todo el mundo, incluida una refinería de petróleo y un buque portacontenedores en América Latina, una oficina regional en África y una fábrica de cadena de suministro en Asia. La creciente influencia y el alcance internacional de este tipo de movimientos de protesta no sólo demuestra la agilidad y la coordinación entre los grupos progresistas en todo el mundo, sino también su capacidad para realmente duelen estas empresas las líneas de fondo. Estos son signos de promesa, ya que los desafíos a los gigantes tecnológicos globales necesitarán toda la fuerza de la solidaridad internacional.

Burbujas de descontento contra los unicornios de Asia oriental

La creciente ira y el clamor por el cambio dirigido contra los gigantes del este asiático Grab y Gojek en el transcurso del año señalan el modus operandi estándar de Big Tech, ya sea de la variedad de Silicon Valley u otros que son locales. Con sus medios de vida aún más perturbados por la pandemia, los trabajadores en Asia se están volviendo cada vez más contra los empleadores de plataformas, y por una buena razón. Citando la falta de beneficios, las comisiones de explotación, la opacidad algorítmica, los cambios de política unilaterales y un entorno de trabajo generalmente severo e inseguro, los trabajadores de la plataforma están comenzando a unirse para protestar por los términos de sus acuerdos laborales.

El año vio más de una docena de protestas organizadas, algunas con varios cientos de trabajadores involucrados, así como varias otras huelgas salvajes. Los sindicatos también han experimentado un rápido aumento de miembros. Seroja, un sindicato en línea para conductores de dos ruedas, ha aumentado de unos 100 a más de 7500 miembros en un año. Si bien el movimiento permanece fragmentado, hay indicios de que está comenzando a surtir efecto lentamente. Alrededor de mediados de 2021, el primer ministro de Singapur expresó públicamente su preocupación por la condición de los trabajadores subcontratados, y existe una buena posibilidad de que la agitación relacionada con los trabajadores haya contribuido a que las acciones de Grab perdieran un tercio de su valor en su primer día de cotización. .

Agarre el ensayo fotográfico de DataSyn

Este ensayo ilustrativo es parte de la edición de fin de año de DataSyn. Vea esta serie de entrevistas especiales que reúne 21 perspectivas de expertos sobre los principales desarrollos en Big Tech, y estas recomendaciones de libros y medios sobre todo lo relacionado con Big Tech del tema.