APCS por Jorge Colmán. Operativo Macrista de dividir el voto peronista: Randazzo, De la Torre y Pichetto
Las expectativas para Juntos por el Cambio no son muy buenas, según sondeos y encuestas los números dan cuenta de una consolidación del gobierno de Alberto y Cristina Fernández, esto hizo replantear su estrategia y puso en marcha el plan de salir a dividir el peronismo.
Macri esta ordenando su tropa y encuentra algunas resistencias entre los propios y aliados. Dentro de su tropa la discusión son las candidaturas y los cruces de candidatos porteños a la provincia y el regreso de María Eugenia Vidal a la CABA. El intento de Rodríguez Larreta es poner pie en la provincia y usa su alfil para avanzar sobre ella. Por otro lado Macri intenta imponer su voluntad sobre los intendentes PRO y los incipientes armados del interior.
El Radicalismo ve la debilidad del expresidente y busca recuperar los espacios perdidos ante candidatos del PRO en sus distritos. La discusión puede llevar al retroceso de la fuerza macrista porque muchos intendentes del interior quieren instalar a los propios y recuerdan los sinsabores de la gestión bonaerense y nacional con cierto recelo.
La Concertación Cívica amaga una suerte de disgusto para reposicionarse ante el macrismo dando guiños a sus excorreligionarios de la Unión Cívica radical. Elisa Carrió no tiene una gran fuerza política, pero tiene capacidad de daño mediático que siempre ha sabido utilizar para construir poder político.
La operación «Ambulancia y Coche Fúnebre» + División del voto «peronista»
Fuera de ese espacio de aliados está el «Peronismo Republicano» y el «Randazzismo», una suerte de viudas e hijas de la derrota, ante la fuerza que encabezan Alberto y Cristina Fernández.
La carta que utilizaría el macrismo sería Florencio Randazzo, un candidato que hizo paso por el kirchnerismo y que ante su caída, ensayó con el Movimiento Evita una suerte de competencia por el «sello peronista» que solo sirvió para que Cristina Fernández no se impusiera en las elecciones contra el Macrismo. El objetivo de esa alianza cumplió sus objetivos y ahora Florencio está nuevamente disponible para una nueva aventura de división.
Esta vez contaría con el frente panperonista de Joaquín de la Torre y Pichetto (Peronismo Republicano), que desesperados han salido con la «ambulancia y el coche fúnebre» para rescatar dirigentes venidos en desgracia para concretar un armado en varios distritos del conurbano y alguno que otro en el interior.
Según «Letra P» están avanzando las negociaciones y Joaquín de la Torre ya ha echo declaraciones «justificatorias» para su salida de Juntos por el Cambio. El regreso de la porteña María Eugenia Vidal y otros pretextos servirían para remendar políticamente la maniobra de división. «Estamos cooptados por una pelea entre Calafate y Recoleta» dijo y no se aclara si Macri es «Recoleta» o lo es Larreta, todo sirve para operar políticamente.
Joaquín de la Torre cuenta con Jesús Cariglino y sus viejos aliados, ya se reunió con los «Florencios» en algunos distritos y «Lavagnistas» que ven con buenos ojos alguna vía donde meterse para jugar políticamente. A nivel nacional esta el Pichettismo que quedó muy golpeado luego de la derrota macrista.
El objetivo del Macrismo es que el peronismo no logre mayoría y seguir erosionando al gobierno de Alberto y Cristina Fernández. Para ello también cuenta a las empresas corporativas de prensa que todos los días operan desde sus tapas contra el gobierno nacional. Igualmente no todo esta cerrado, con las encuestadoras testeando ojea constantemente el humor social, si los números dan para una pelea pareja meterá todo en la bolsa de Juntos por el Cambio, todo depende del escenario con que se llegue a noviembre.